Aunque parece inconcebible pensar que alguien pueda decir que es bueno pagar impuestos, lo cierto es que muchas personas pudieran coincidir con esta afirmación de que sí es bueno pagar impuestos.
Esta afirmación obedece a que muchas personas entienden que gracias a los impuestos que cobra el gobierno es que se pueden financiar los servicios básicos que se ofrecen desde el Estado para la población en general.
Algunos de estos servicios son los de salud, educación, electricidad y transporte, entre otros.
Parte de los recursos económicos que recauda el gobierno por concepto de impuestos se dedica a la construcción de hospitales, escuelas, carreteras, soluciones viales y para obras de carácter social.
En la medida en que más personas cumplan con sus obligaciones tributarias el país contará con más recursos para invertirlos en infraestructuras y programas sociales que beneficien a las comunidades más necesitadas.
